Pretextos más comunes para no ir a trabajar

Por: Mayra Dávila

¿Alguna vez te has sentido tentado a inventar un pretexto para faltar al trabajo? Sin duda alguna, faltar al trabajo no es una situación fuera de lo común, pero es importante distinguir entre razones reales y excusas. Estos son algunos de los pretextos que más se utilizan en el entorno laboral para faltar o pedir incapacidad.

Enfermedades

Uno de los pretextos más repetidos suele ser las enfermedades, y son más sencillos de comprobar si tienes un médico de confianza que pueda bridarte un diagnóstico que avale la enfermedad que “estás sintiendo”. Quizá sí te sientas un tanto enfermo, pero no para el punto de tener que faltar al trabajo. Entre las enfermedades que se utilizan como excusa son: 

• Dolor de cabeza o migraña
• Problemas estomacales o infección
• Gripe o COVID-19
• Lesiones (reales o inventadas)
• Fiebre
• Problemas de salud mental

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Problemas familiares

Cuando se es padre o madre de familia, en ocasiones los hijos pueden convertirse en el pretexto perfecto, ya sea ante el cuidado de ellos por enfermedad, eventos o citatorios en la escuela, o cualquier necesidad que se tenga que cubrir de forma inmediata. De igual forma, las emergencias familiares o muerte de un familiar, desafortunadamente, suelen usarse como excusa. La muerte de un ser querido no es un juego. 

Citas

Dentro de las más comunes y que no pueden faltar, son las citas médicas, bancarias o de trámites de gobierno, de las cuales es sencillo inventar: “Tengo que ir al banco a hacer un trámite”, “tengo una cita para estudios de sangre”. Sin embargo, estos pretextos pueden ser más fáciles de comprobar, al pedir un documento que avale tal cita, y puedes terminar mal parado con la excusa. 

Es importante remarcar que la honestidad y la responsabilidad son una clave en el entorno laboral, y si abusas de ésta inventando excusas constantemente para saltar un día de trabajo puede llegar a afectar tu reputación en el trabajo, desde la desconfianza con tus compañeros y superiores. Por lo que te recomendamos que fortalezcas tus relaciones con tus superiores para poder mantener una comunicación abierta y honesta, en caso de que necesites un permiso particular.   

¿Tú has inventado una excusa? 

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